Redescubriendo a la venezolana Marisol Escobar, la musa del arte pop

Tal vez el nombre de María Sol Escobar no diga mucho para los venezolanos desprevenidos; ni siquiera su obra, que debe ser estudiada desde los mas altos estándares artísticos, sea tan conocida como merece; pero cuando se menciona su cercana amistad con Andy Warhol, uno de los iconos del arte del siglo XX la figura de Marisol (así, a secas) despierta la curiosidad de muchos.

Desde el 15 de Abril, el museo de arte Pérez de Miami presenta la exposición “Marisol y Warhol se toman New York”, espacio que busca resaltar la importancia e influencia de ambos artistas en el surgimiento del arte pop en la década de los 60.

Marisol además de haber ganado reconocimiento por su estrecha amistad con Warhol fue un referente del pop art en New York, en una época en donde las mujeres tenían reducida participación en estos escenarios de expresión. Aunque la artista aseguró en una oportunidad no sentirse discriminada ni por ser mujer, ni por ser latina, señalaba que al inicio “los hombres no se sentían amenazados por ella y no tomaban su arte tan en serio”.  

Sus obras fueron las más admiradas del momento, en las que conjugaba diversos materiales como la madera, la pintura y la fotografía y participó en una serie de exhibiciones exitosas, en las que expuso su trabajo junto a renombrados artistas como Marcel Duchamp y Pablo Picasso.

Los Generales, escultura de Marisol Escobar

Entre sus obras más destacadas se encuentra Los Generales(1961-1962), que representan a Simón Bolívar y George Washington, cabalgando en un caballo elaborado con un barril de madera, escultura adquirida por el Albright-Knox Art Gallery de Nueva York.  En la fachada principal del Capitolio Estatal de Hawaii, en Honolulu se exhibe su obra Father Damien (1969) y una obra similar reposa en la National Statuary Hall Collection, en el Capitolio de los Estados Unidos.

De padres venezolanos, Marisol nació en París y vivió en Caracas toda su infancia y pre adolescencia, a los 11 años su madre se suicida y la joven adoptó el silencio como parte de su vida, lo cual reflejó más tarde en sus obras.

Su exitosa carrera le otorga el reconocimiento de ser una de las mujeres precursoras del movimiento pop, su amigo Andy Warhol la catalogó como su musa y la incorporó en varias de sus películas, sin embargo su nombre permaneció olvidado y la exposición pretende revivir su legado, recuperar la importancia  de su originalidad y la fuerza de sus obras que fueron evolucionando hasta lograr un estilo  único y propio, cargado de sus raíces venezolanas integradas al encuentro intercultural de su vida alrededor del mundo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *